Pieles grasas o mixtas: cómo son y cómo tratarlas
Presencia de poros dilatados, producción excesiva de sebo, tendencia a desarrollar acné... ¿Te reconoces en esta descripción? Entonces es probable que tengas una piel grasa o mixta.
La piel grasa es muy fácil de reconocer, ya que lo que la identifica es una producción excesiva de sebo, una sustancia grasa natural producida a nivel de los folículos pilosos que tiene la función de hacer que la piel esté suave e hidratada y de protegerla de los agentes externos como la contaminación, el viento y la luz solar.
Piel grasa: características
La piel grasa puede clasificarse en diferentes categorías, cada una con características específicas. Descubramos juntos los cuatro principales:
- Piel grasa: se caracteriza por la presencia de una mayor cantidad de sebo que la piel normal, concentrada especialmente en la zona T (frente, nariz, barbilla)
- Piel grasa seborreica: se caracteriza por la producción de un exceso de sebo que obstruye los poros de la piel, provocando así los conocidos "poros dilatados". A la vista tiene un aspecto irregular, áspero y desigual
- Piel grasa o asfíctica: se reconoce por la presencia de comedones (que crean puntos blancos cuando están cerrados y puntos negros cuando están abiertos). Los puntos negros ocluyen los folículos pilosos, impidiendo la salida del sebo y la hidratación de la piel. Por ello, la piel grasa asfíctica suele tener un aspecto seco, con una tez apagada y la presencia de impurezas
- Pieles mixtas: debido a un funcionamiento diferente de las glándulas sebáceas según el tipo de piel, este tipo de piel tiene zonas en las que la piel es grasa (zona T: frente, nariz, barbilla) y zonas en las que tiende a ser seca (normalmente mejillas y contorno de ojos)
Pieles grasas y mixtas: las causas
Hay muchas razones por las que la piel puede producir un exceso de sebo y, por tanto, ser una piel grasa/combinada. Aquí hay algunas:
- Factores genéticos: En la mayoría de los casos, la piel grasa es hereditaria. Por lo tanto, si nuestros padres o familiares ya han luchado con este tipo de piel, probablemente nosotros también lo haremos
- Desequilibrios hormonales: los factores fisiológicos internos relacionados con las hormonas suelen ser la causa de la producción excesiva de sebo. Por ejemplo, los hombres tienden a tener la piel grasa precisamente por sus mayores niveles de testosterona. Además, también debido a los desequilibrios hormonales, pueden producirse fenómenos transitorios de aumento de la producción de sebo durante el período de la adolescencia
- Clima excesivamente húmedo y caluroso o aire contaminado: sobre todo en verano, la piel tiende a mostrarse cada vez más grasa, no sólo por una sudoración más intensa. Como defensa contra los agentes externos, la piel también puede reaccionar con una producción excesiva de sebo, que actúa como capa protectora
- Cosméticos inadecuados o limpiezas demasiado frecuentes: el uso de productos que no son adecuados para tu tipo de piel puede provocar cambios en la misma. Por ejemplo, el uso de un producto a base de aceites vegetales puede hacer que la piel sea demasiado grasa, o una exfoliación demasiado frecuente puede hacer que la piel reaccione con una producción excesiva de sebo
- Dieta inadecuada: se desaconsejan los alimentos grasos o con un alto índice glucémico. Es mejor consumir mucha fruta y verdura, rica en antioxidantes como la vitamina C y E, y preferir alimentos ricos en omega 3 y 6, como el pescado y los frutos secos. Otro consejo que no puede faltar es el de beber agua con regularidad, que, gracias a su acción hidratante, permite tener un cutis radiante, rellenado y fresco
¿Qué hacer?
¿Cuáles son los tratamientos adecuados para las pieles grasas y mixtas? Como hemos señalado anteriormente, los diferentes tipos de pieles grasas/combinadas requieren un análisis en profundidad de las causas y un tratamiento ad hoc en consecuencia. Seguir al pie de la letra las rutinas predefinidas, que no tienen en cuenta las particularidades de tu piel, puede conducir a un empeoramiento de la situación y a la hipersensibilización de la piel, a las molestias o a la aparición de nuevas imperfecciones.
Lo primero que hay que hacer, por tanto, es profundizar en diferentes rutinas y productos de belleza para descubrir los que mejor se adaptan a las necesidades de tu piel. ¡Descubre la rutina de cuidado de la piel mixta o grasa de Sendo!