¿Skincare? La cabeza también merece lo suyo.
Por lo general, dedicamos buena parte de nuestro tiempo a cuidar de nuestro cabello: elegimos cuidadosamente el corte, el color, los tratamientos y las herramientas de peinado, pero a menudo descuidamos por completo nuestro cuero cabelludo. Un champú demasiado agresivo, cepillos con cerdas demasiado duras o movimientos incorrectos pueden contribuir al daño. La piel de nuestro cuero cabelludo tiene necesidades específicas, y mantenerla intacta y saludable hará que nuestro cabello también crezca sano y brillante.
A menudo, el secreto para un cuero cabelludo sano no radica tanto en hacer algo en particular como en "no hacer" algo dañino o potencialmente irritante. Aquí hay unos ejemplos:
- Masajee, ¡no frote! La diferencia entre un masaje suave y una exfoliante vigoroso es importante. El cuero cabelludo es un área delicada, y un suave masaje con las yemas de los dedos durante el lavado con champú puede ayudar a limpiar y estimular la circulación en la piel. Por el contrario, frotar la piel con demasiada fuerza puede provocar irritación y rascado, lo que no tendrá ningún efecto beneficioso para la piel.
- Proteja tu cabeza del sol. Si estás en la playa o planeas exponerte al sol, protégete la cabeza con un pañuelo o un sombrero. El cuero cabelludo es un área sensible de nuestro cuerpo, ¡y puede quemarse rápidamente por el sol a pesar de nuestro cabello! Si llevamos el pelo con raya, por ejemplo, esa zona estará constantemente expuesta al sol, con todas las consecuencias que puede traer la exposición sin protección. Una buena alternativa es utilizar un protector solar adecuado en las zonas descubiertas.
- Accesorios y cepillos. Es mejor utilizar cepillos y peines con cerdas suaves o redondeadas que no arañen la piel. Si te gustan los accesorios para el pelo, opta por los que no sean metálicos o con puntas especialmente afiladas, para evitar dañar el cuero cabelludo al llevarlos.
- ¡Cuidado con el calor! El peinado y el secado son bienvenidos, siempre que las temperaturas no sean demasiado altas y el calor se dirija más hacia el cabello que hacia el cuero cabelludo.
- Anticaspa una vez al mes. Aunque no sufras de caspa, una vez al mes es buena costumbre utilizar un champú sebo normalizador, para mantener a raya la proliferación bacteriana en la piel y mantener la situación equilibrada y saludable.
- Skincare para... ¡el cuero cabelludo! En caso de irritación, enrojecimiento o sequedad, es posible aplicar productos específicos para cuidar la piel, repararla y calmar la sensación de malestar. ¿Un ejemplo? Crema Gel Lenitiva Cuero Cabelludo, una loción a base de fitoextractos biotecnológicos, con una fórmula ligera y de rápida absorción. Es perfecta para aplicar tanto en cabello húmedo como seco si es necesario, para calmar las irritaciones y dar una sensación de alivio inmediato a la piel.
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